Hoy, el diario El País se pregunta ¿siguiente
líder en la mira de Peña Nieto? y tras “recordarnos” las infamias (todas
ellas mediáticas) en que ha estado involucrado él y su “divina familia” asegura
“Carlos
Romero Deschamps se ha convertido
en el nuevo personaje incómodo del PRI (…)” (SALUD.
Romero Deschamps
es, desde hace tiempo un apestado en el PRI, pero el poder acumulado y las prebendas
obtenidas, no son producto de la casualidad, sino de su “acomodo” a las
estructuras de poder nacional, de su capacidad de metamorfosis política baste
recordar que en 1996 Deschamps se
alió a Chuayffet (entonces en
Gobernación) para evitar que Murillo
Karam ocupara la Presidencia del CEN del PRI. Hoy Murillo
Karam es el tercero de abordo y se la tiene guardada.
Si todas las fichas parecen enfilarse a un capicúa en su
contra, pero en realidad descobijarlo públicamente no está encaminado a
encarcelarlo, más bien tiene como finalidad “reducir” su capacidad de operación
política previamente a la reforma energética, es decir aflojarle el cuerpecito
para que en el momento decisivo no le quede más remedio qe aceptar las
condiciones de la “modernización” de PEMEX.
De mientras Romero
“mueve” sus fichas para tratar de recuperar espacios y mantener el poder, sabe
que está acorralado y que el expediente de corruptelas que se “filtra”
a los medios es apenas lo que se puede mostrar al público mexicano, lo que
siempre le han mostrado, apenas las capas superiores de la mugre acumulada
durante casi un siglo de sobrellevar ese tipo de líderes.
Deschamps será sólo
otro instrumento más del Estado mexicano, para entregar de manera velada (y
abierta) PEMEX a inversionistas nacionales y extranjeros, servirá (en su momento)
para “refrendar” su compromiso a favor de la “modernización” de PEMEX y
el país.
No esperen que Carlos
Antonio Romero Deschamps, sea encarcelado, pues hay muchos “políticos”
(de todas las fuerzas formales nacionales) que le deben favores y a los que
acudirá cuando sea necesario.
Este país es sólo el botín político del mismo grupo de poder
y sólo cambiará cuando les hagamos entender que estamos hasta la madre de ellos
y sus componendas.
SALUD.
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