Estos días de muertos, viajé a Querétaro (estado de la
república ubicado en el centro de esta) y cuando íbamos llegando mi nieto (un
joven de 13 años) me preguntó: “¿aquí quién gobierna?” y tras
explicarle que ahí gobierna una mafia desde hace muchos años, le dije que el actual
gobernados era panista y se llamaba “pancho” Domínguez, que es hijo de un “intimo” amigo de Mariano Palacios (que fue gobernador a
finales de la década de los 80) y que antes había sido José Calzada Rovirosa, hijo de Antonio
Calzada Urquiza, que había sido gobernador en los 70, se limitó a
decir: “ummmmh”
Y sí, en Querétaro, como en muchas otras entidades
federativas de la república mexicana, un grupito de “ilustrados” ha mantenido
el poder desde hace un siglo, bastaría con revisar los apellidos del los
gobernadores de seis o siete estados, para descubrir la relación de poder y las
ligas de sangre que unen a sus “gobernadores”
En la tarde del día primero de este mes, otro de mis nietos,
un joven de 17 años, describió de manera muy gráfica el fenómeno del estado de
Hidalgo con las familias Rojo, Lugo, Verduzco, Rossell, Murillo y Olvera; los vínculos de poder y familiares que los unen, las
estructuras de control que unas siete familias en ese estado han mantenido
desde hace 80 años apropiándose de las arcas estatales y del control
administrativo local.
Durante la noche la tertulia discurrió sobre temas del magisterio
nacional y la actual situación de ese gremio, tras la “reforma” educativa, se
habló del “examen” magisterial y de las plazas heredadas; expliqué que en
toda la república mexicana, la “venta” de plazas magisteriales no
llega ni al 1% y que en general es un fraude urdido entre el SNTE y la “autoridad”
educativa local, para obtener recursos (un fraude en el que se hace creer al maestro que se le ayuda, en pocas palabras un ardid)
Hablamos de las familias de docentes, de la mística
transmitida de padres a hijos por esa profesión, de la carencia de un programa
nacional de formación docente y de la ausencia de verdaderos educadores en los
órganos de administración educativa, repasamos los titulares de los servicios
educativos en México y encontramos desde un pobre pendejo que dice haber
estudiado Administración Pública y Ciencia Política en una universidad privada
de muy dudosa “clase” y luego algo que se denomina “estudios latinoamericanos”
en una universidad norteamericana; hasta un ingeniero agrónomo y algunos “secretarios”
con estudios en el instituto Patrulla (una de mis hijas hizo referencia a las “educadoras”
del instituto Fleming)
Nos reímos, nos divertimos y hasta nos enojamos, pero fue
una tarde-noche agradable en la que (como siempre) se exponen puntos de vista
muy disímbolos.
Al otro día, en algún momento alguna de las asistentes al
recalentado del festejo, pidió ver una televisión, pues “su novela” esta en un
momento culminante y pues se prendió la televisión, ahí apareció la muy capaz y
distinguida Sofía Castro (hija del
productor de la novela y de la “señora” Rivera, que despertó un inmenso debate nacional sobre corrupción tras la publicación de su propiedad conocida
como la Casa Blanca) hablando un pésimo ingles y actuando de una manera muy
simplona (por decirlo de una manera)
Entonces se desató otra controversia respecto de las
“familias” que aparecen en la pantalla televisiva desde hace ya unos 30 años,
el hijo o hija de …; la nieta o nieto de …; el hermano de la cuñada de …; el
esposo de la productora de …; en fin una dinastía que nos proyecta un México maravilloso
(pese a sus muy desagradables actuaciones) en el que el futbol, la virgen de Guadalupe
y las familias que nos “gobiernan” hacen un extraordinario
papel para mediatizar las gravísimas carencias de la población.
Mi nieto pequeño (de tres años) que como dice mi hermano es
muy vivaz entonces preguntó “¿entonces no nada más los maistros (así)
heredan las plazas?”
Claro los presentes no pudimos aguantar la carcajada.
SALUD
Te recomiendo:
No hay comentarios:
Publicar un comentario