Y ¿cuál es la sorpresa?

Un video en el que unos señores a los que les pagamos como diputados están en una fiesta con “scorts” (antes les llamábamos suripantas para no espantar a los niños y todavía se les puede denominar acompañantes), que esa casa en que están es parte de los lugares que pagamos también nosotros para que ellos pudieran descansar.

Que además son parte de un partido político defensor de los valores personales y familiares, que están casados y tienen hijos, es más me dicen que uno de ellos cada domingo en la misa del obispo se pasa toda la misa hincado.

Pero adicionalmente, resulta ser que también la renta de las acompañantes y las bebidas que ahí se sirvieron fueron parte de los gastos de la Reunión Plenaria que el grupo parlamentario del PAN realizó.  SALUD

Esa casa renta en enero no menos de 4,500 dólares diarios (el turismo canadiense se la pelea hasta los primeros días de febrero) y esas acompañantes no dejan su noche por menos de 5 mil pesos, en resumen esa noche sólo por esos servicios se gastaron unos 100 mil pesitos (que son para ellos cien mil pesitos si además los paga el erario federal con una subvención extraordinaria) SALUD

En realidad como dijo Villarreal, ES UN EVENTO PRIVADO, que pagamos los contribuyentes y en el que ellos saben que cuentan con tanta impunidad que además les valió madres ser filmados.

No hay sorpresa alguna, así actúan ellos, no tienen el menor recato respecto de sus vidas privadas aunque los domingos, acompañaditos de la mujer (peinadita y bañadita) y de los hijos (bien arregladitos y con harta loción) lleguen a la catedral (cuando viven en donde la hay o a la capillita (cuando no hay catedral) y lo primero que buscan son los medios para que hagan constar que ahí estuvieron y que son devotos cristianos y muy apegados a las costumbres familiares.  SALUD

No hay sorpresa, pues seguro el domingo que viene la esposa de alguno (quizá de más de uno) hasta asegurará que era la prima de una amiga que estaba acompañando a su esposo, para que no se sintiera solo y porque ella tenía que atender a los niños y al amigo del compadre de su esposo.  SALUD