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El PRD desde su nacimiento en 1989 estuvo conformado por
corrientes no sólo divergentes sino hasta opuestas, en principio por la
diversidad de sus miembros fundadores (ahí tuvieron cabida desde viejos militantes
de los PC y PCM [algunos de ellos miembros de guerrillas] hasta grupos de
sinarquistas que habían permanecido enquistados en el PARM) así en la “institucionalización”
moderna de la “izquierda” hay graves casos de reaccionarios y hasta
doctrinarios de derecha que tuvieron cabida ahí.
Esos grupos al integrar un “nuevo partido” buscaron “acomodo”
(como decía Marcelino, por cierto
saludos), se repartieron los pedacitos del pastel que tenían frente a si y dejaron
migajas para los grupos radicales (para las colas como decía el
pino qepd y allá nos vemos), en fin el PRD se asume desde su creación
como una estructura plural e incluyente, en el que rápidamente las fracciones
mostraron sus “capacidades” y “escalaron” (a partir de las
prácticas corporativas que siempre criticó y que nunca debe aceptar la
verdadera izquierda) los puestos de dirección.
SALUD
El PRD que lejos de dar continuidad a la lucha histórica del
PCM, PC, PMS, PSUM y la izquierda mexicana, se convierte en la nueva casa del “nacionalismo
revolucionario” o como decía Perelló:
“la
casa de los que no quisieron en Insurgentes” SALUD,
esa estructura reproduce rápidamente los más repugnantes vicios del PRI, las
estructuras corporativas y clientelares dan nacimiento al sectarismo, se
magnifica la repartición de cuotas y sus “dirigentes” (empezando por Cuauhtémoc
Cárdenas) postulan con falta de vergüenza y una inmensa ignorancia “Recuperaremos
los ideales históricos de la Revolución Mexicana, la vigencia plena de la
Constitución y la legitimidad de nuestro gobierno y nuestros gobernantes” SALUD
Sólo han pasado 25 años desde entonces, hoy aquel niño de
buenas intenciones que surgió para dar cabida a los viejos priistas expulsados
del PRI, es un muchachote que busca liberarse de los usurpadores que desde hace
más de 15 años los desplazaron. SALUD
Desde entonces dos bloques (tribus) han mantenido la dirección
de un partido político que sólo los representa a ellos y les sirve a ellos: Nueva
Izquierda y Alternativa Democrática Nacional y sus líderes nacionales: Jesús Ortega y Héctor Bautista; han compartido las mieles de los recursos y los
frutos de las prebendas; son quienes con aproximadamente el 40% de los
consejeros estatales y casi el 50% de las estructuras distritales y municipales,
desplazaron a los “nacionalistas revolucionaros” que lo fundaron y buscaban
entonces “recuperar los ideales de la Revolución mexicana” SALUD
Como si la revolución mexicana fuese patrimonio grupal o sus
“ideales”
(lo que ello signifique) fuesen los de los mexicanos que queremos un México
diferente. SALUD
Pero tanto Nueva Izquierda como Alternativa Democrática
Nacional, están “gastadas” (como decía mi viejo maestro Trejo, a quien también veré por allá, espero que no muy pronto); ya
para este proceso interno la primera tribu llega con cinco planillas (El
Origen Nos Une, Agenda Social Demócrata, Bloque 100 Progresista, La Uno y Fuerza
Democrática) que con poder diferente en cada región nacional buscan su fracción
de recursos y prebendas. Mientras que en
Alternativa Democrática Nacional hay tres divisiones: Ocho (que así se llama
por ser el número de miembros que la forman), Siete y Alternativa (aunque resulte
redundante y cacofónico) SALUD
La separación no es reciente, data del año pasado, aseguran
quienes los conocen, y afirman que se profundizó cuando el coordinador de los
senadores Miguel Barbosa fundó su tribu: Frente de Izquierda Progresista,
y se unió al bloque Antichuchos, comandado por René Bejarano y Leonel Godoy. SALUD
Además el mismo Barbosa
que ya logró la Presidencia del senado (desligado de Nieva Izquierda) busca
reagrupar “apoyos” en favor de “nuevos tiempos”. Por otra parte Silvano Aureoles, coordinador de la bancada del PRD en la Cámara de
Diputados, también ahora flamante presidente de la Mesa
Directiva de San Lázaro y ya desde antes ajeno a los chuchos, se pronuncia
por la necesidad de “sangre nueva”; nuevo o nueva es la
palabreja para designar algo muy viejo (sin agraviar por su puesto a Cuauhtémoc que apenas tiene 80 años, recién
cumplidos)
Ya hoy “aparecen” notas que dejan ver que
siempre sí se enrolará para contender el hijo del general y cachorro
de la revolución por la dirigencia nacional del PRD, para (ahora sí) “recuperar
los ideales de la Revolución mexicana”
SALUD
Se van los chuchos (festejemos con platillos y trompetas) para dar paso al "nacionalismo revolucionario" como antaño. SALUD
SALUD
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