En México, en donde sólo hay blancos o negros, en donde las tonalidades
de gris desaparecen ―lo podemos ver en deportes, en religión y en política de
manera muy clara, pues ahí o todas las glorias o todo el denuesto― quizá sea
momento de revisarnos, de mirar hacia adentro y pensar en la necesidad de de
ver tonalidades en la vida socio-política nacional.
A cuenta de parecer revisionista u optimista ―como suele
llamarme mi hija Gloria para no decirme pendejo―y como los “locutores” (convertidos a analistas por
la TV) parecen pericos (chachalacas) están tan de acuerdo con todo lo bien que
mediáticamente le están saliendo as cosas a Peña Nieto ―aunque ya hay voces
discordantes, hasta la de Leo Zukermann
que puedo considera oficialista― hacer una reflexión al respecto, cuesta pero
hay que hacerla.
El primer acto de gobierno que presidió Peña Nieto fue con
las fuerzas armadas (en su carácter de Jefe Supremo) y el compromiso de
incrementar sustancialmente los presupuestos de las Dependencias de gobierno
fue evidente, es decir, los descontentos que hay al interior, parecen acallarse
con billetes aunque los billetes dejan de alcanzar en algún momento con la
milicia y es sin lugar a dudas el peor enemigo de la legalidad, así que sigamos
aportando para garantizar “lealtad” mientras dure.
Ya del “pacto
por México” he hablado mucho, pero son una cantidad importante de “acuerdos”
para hacer un mejor país, aunque pienso que bastaría con hacer cumplir la ley y
someterse al “estado de derecho” que tanto pregonan y defienden los señores y
pienso que para hacer cumplir la ley aparte de voluntad, se requieren cojones,
cosa que le hace falta a tod@s los integrantes del gabinete.
Hace falta también un gran programa de aplicación eficiente
y oportuna del gasto público, llegando a atacar de manera prioritaria lo que más rezago tiene,
cosa que por lo que se ve en la famosa “cruzada”
contra el hambre no se está pensando hacer, pues en la lista de municipios
a atender hay algunos que ni tienen pobreza y quedan fuera una gran cantidad de
los que si requieren ser atendidos, pero además ya nos “anunciaron” que sólo
funcionará con la “participación” social (es decir de a gratis) pues pior pues
como decía don carlitos Hank “programa
pobre, pobre programa” (o algo así)
Una “acción” mediática genial es la “famosa” reforma
educativa que lejos de solucionar el problema, aplaza y difiere, haciendo
más grave la precaria situación, ahora nos “comunican” a cada momento que “se evaluará a los maestros, reconociendo las
condiciones en que trabajan” pero si ni conocen las condiciones en que
trabajan muchos maestros de las comunidades que dejaron al margen de su famosa “cruzada”.
Es por demás, focalizar acciones, significa conocer las
condiciones antes de implementar ocurrencias.
Llego, pues a la médula, hacer programas significa empezar
por hacerlos, no iniciar con la acción mediática de anunciarlos para ver como
nos sale la implementación. SALUD.
En materia de seguridad además de desaparecer la Dependencia
encargada de ello (que es, sin lugar a dudas una de las causas del desmadre que
vivimos) y de “anunciar” y “anunciar” la creación de la Gendarmería Nacional,
pues no se ha observado una directriz, una capacidad de modificación, una
intencionalidad de cambio.
En materia de política económica, parece que la intención
sigue siendo favorecer el mercado internacional a costa del nacional, la
reforma laboral y las reuniones con empresarios, así como los anuncios de nuevas
inversiones en sectores de alta tecnología así nos lo dejan ver.
Seguimos pues en la misma ruta que desde hace treinta años
hemos venido transitando y que NO ha dado resultado.
SALUD
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