Sólo para recordar, el Artículo 254 del Código Penal del DF
establece “una organización de hecho de tres o más personas para cometer, en
forma permanente o reiterada” como asociación delictuosa y delincuencia
organizada.
Ignoremos el caso Heaven y lo que ahí se ha demostrado, hoy
aparece en redes sociales un hecho delictivo constitutivo de delito, en el que
desde una motocicleta descienden tres sujetos (vestidos con uniformes de la
policía local) para “bajar” de un vehículo
a un individuo y (tras propinarle unas pataditas) lo suben a una camioneta
roja.
Cuatro individuos (si consideramos que la camioneta sólo llevaba
conductor) en plena avenida Cuauhtémoc a la luz del día (frente a innumerables
testigos) que “levantan” (como dicen allá en donde si hay delincuencia
organizada) o secuestran (como decimos en donde NO hay delincuencia organizada)
Todo apunta a un acto criminal organizado contra una persona,
para retenerla contra su voluntad, sin prejuzgar si son o no policías.
La detención hace unos días de un uniformado del Sector Zona
Rosa-Ángel y durante la semana de dos más, me hace suponer que parte de los
cuerpos operativos están atendiendo dobles órdenes o dejando de atender las
órdenes oficiales.
La teoría señala que cuando los brazos empiezan a trabajar
con el contrario es por que parte del cuerpo ya se encuentra corrompida, es
decir, al encontrar elementos de la corporación policiaca local involucrados en
actor delictivos, no debe preocupar por esos elementos, sino por los mandos.
Las organizaciones criminales abrazan a los miembros de los
cuerpos policiacos y en casos extremos, son los miembros de los cuerpos
policiacos los que cobijan e incluso alientan a las organizaciones criminales,
esperemos que en el caso del DF estemos apenas en la etapa inicial y que además
de los elementos operativos, se llegue a los mandos que están encubriendo esas
actividades.
SALUD
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