sábado, 8 de noviembre de 2014

Entre Acteal y Ayotzinapa

Primero una anécdota: hacia mediados de 1995 después de la caída de Warman como secretario de Agricultura, llegó un grupito de personajes (saludos Víctor y Héctor) acompañando al señor Labastida (quizá dos meses después) y recuerdo que en una reunión (no más allá de abril) me dijeron “nosotros venimos porque Labastida va a ser candidato a la presidencia en 2000” yo sonreí sarcásticamente y dije para mis adentros “anhelos de tontos

De hecho recuerdo que unos meses (quizá un año) después en Tlaxcala (en la feria de Tlaxcala) se me ocurrió mencionarlo y ese día el señor Álvarez Lima me invitó una copa en el MedClub (lugar al que NUNCA había podido entrar yo sólo y vaya que lo había intentado) para “platicar al respecto de ese comentario

Pues bien, las cosas parecían eso, sólo un anhelo de su “equipo” de trabajo hasta que un día de diciembre de 1997 “amanecimos” con la noticia de que habían atacado y matado a 45 indígenas en una localidad de Chenalhó, que se llamaba Acteal, entonces no existían estos instrumentos modernos, es más, para poder tener noticia del hecho habían pasado más de 24 horas, creo que el Ministerio Público de Chiapas dio fe del hecho hasta 20 horas después de sucedido.

Pues bien, el asunto se manejó exclusivamente a nivel de medios de comunicación, recuerdo una nota de televisa presentando (recreando) la violencia, también recuerdo un “artículo” de Bustillos (por cierto muy amigo del señor Labastida) que narraba hechos que obviamente no conoció, ni tuvo noticia de ellos, pero era también una recreación (fantástica) de lo “ocurrido”  SALUD

Los espacios de “análisis” de la radio se llenaron de “distinguidas” personalidades que culpaban tanto a la Secretaría de Gobernación como al gobierno del estado, de haber suministrado armas y entrenado grupos paramilitares para contrarrestar la presencia del EZLN y mermar las bases sociales que existían de zapatistas en algunas regiones de Chiapas, uno de esos “distinguidos” periodistas Marín ahora director editorial (casualmente) de Milenio.

En aquellos años, los diarios y sus “columnistas” hacían opinión pública y lanzaban rumores, que si ya fulano se desgastó o que si sutano está haciendo un excelente trabajo o que si ya perengano se peleó con el bueno; en fin, chismes “pagados” o simplemente intencionadamente llevados a comunicadores para que se regaran, así una semana después de Acteal, todos los diaripos hablaban de la “inminente salida de Chuayffet del gabinete” y casi todos “coincidían” en que se requería un hombre “honesto” como lavestidaSALUD

Ahora fue Ayotzinapa, un pésimo manejo de daños de parte de TODO el gobierno federal y muchos tuits que administrados o no, derivaron en una tremenda tunda mediática y una inmensa cantidad de pifias y desatinos, que hacen ver la inminente necesidad de recomponer el equipo.  Primero precisamente en ese diario que editorializa ese personaje siniestro y obtuso, una defensa del don beltrone (a petición expresa) respecto de “los infundios de The Washintong Post” respecto de las acusacions de narcotráfico que hay en Estados Unidos, luego en el mismo diario el “proclive columnista” Ciro con una columna lavándole el culo al mism obscuro personaje.

Luego una llamada desde The Economist (como para que lo leyéramos desde otro mundo y ahora la “cargada“ desde los diarios de circulación nacional, SALUD apostando a la salida de Osorio y la llegada de Beltrones.

Desde antes de la conformación del gabinete y una vez dados a conocer el gabinete de las complicidades, quedó claro que los pesos y contrapesos habían quedado olvidados, dije entonces “Manlio Fabio se hizo a un lado (por el bien de la estructura partidista) pero esperaba “a cambio” ser recompensado con un pedacito de poder que no le fue otorgado” y también hable del mismo Labastida y de Beatriz Paredes, que también esperaban “cobrar” su “apoyo” y simplemente fueron IGNORADOS por Peña Nieto.

Los disturbios del 1 de diciembre, tenían tras de si una mano priista y casi puedo apostar que la de la Betty, las movilizaciones de finales del 2012 del EZLN tenían tras de sí una mano y casi puedo apostar que la de lavestida; estas manifestaciones tienen tras de sí una mano y casi puedo apostar que las de don beltrone.

En el priismo tradicional, ellos se llevan así para cobrar sus prebendas. Nada ha cambiado entre Acteal y Ayotzinapa.

SALUD

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